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Hace cuatro años y medio inició esta aventura llamada AMARÍSIMO. En el siguiente blog les contaré un poco de cómo iniciamos esta etapa, y por qué elegimos el negocio de lencería y trajes de baño.
Regresaba después un año de estar fuera de México, donde había descubierto otras culturas, otros países, y una actuación muy diferente a la mía, pero que al final, en un mundo capitalista aunque el proceso es diferente, el fin último es el mismo, la satisfacción del cliente.
Sabía que al regresar de mi viaje, tenía una misión y era aportar algo a mi México lindo y querido. Mi mamá tuvo la idea de que iniciáramos con la venta de brasieres, y me di cuenta que no existía una tienda en Mérida que vendiera ropa interior fuera de las grandes cadenas y fue así cómo decidimos abrir una boutique de lencería. Posteriormente, y gracias a la buena aceptación de nuestras clientas, se aperturó otra línea de negocio que fueron los trajes de baño.
En muchas ocasiones cuando abres un negocio tienes un idea en mente, pero ya en el tránsito tus propios clientes te van diciendo de las necesidades que tienen, es por eso que se decidió ofertar lencería como baby dolls, lingerie night y accesorios para brasieres que brindan soluciones para las blusas o vestidos.
Amarísimo ha sido mi mejor maestría y mis clientes mis mejores maestros, porque gracias ha ustedes no dejo de motivarme a investigar sobre las nuevas ofertas y demandas que hay en el mercado.
Hoy mi nuevo reto es ayudar a otras mujeres como yo, a iniciar su negocio de lencería, fomentando el amor propio, confianza y seguridad de la mujer, no solo mexicana, sino del todo el mundo.
Gracias infinitas por su confianza desde el día 1.
María B. Amaro
Propietaría de Amarísimo
